En 1979 la Conferencia de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) proclamó el Día Mundial de la Alimentación en coincidencia con la fecha de fundación de la FAO en 1945. En 1980, la Asamblea General de las naciones Unidas respaldó esta designación por considerar que "la alimentación es un requisito para la supervivencia y el bienestar de la humanidad y una necesidad humana fundamental"
Su finalidad es concientizar al mundo sobre los problemas de alimentación de los pueblos y la necesidad de solidarizarse en la lucha contra el hambre, la desnutrición y la pobreza.
La desnutrición es la principal causa de deficiencia del sistema inmunitario. La desnutrición favorece el desarrollo de infecciones –neumonía-, impide al organismo responder adecuadamente a los antibióticos y agrava el pronóstico de la enfermedad.