Entre un 10 y un 15% de los individuos mayores de 65 años presenta patología respiratoria crónica; estas enfermedades representan el 14% de las admisiones hospitalarias en este grupo etario. El asma bronquial ocupa un lugar destacado entre estas afecciones.
La prevalencia del asma en la población de la tercera edad oscila entre el 6.5 y el 17% siendo apenas más frecuente que en los más jóvenes, presumiblemente porque a medida que avanza la edad tasa de incidencia excede a la de remisión.
Causas
El asma alérgica por alergenos comunes (ácaros del polvo doméstico, pólen, etc.), pierde relevancia a medida que se incrementa la edad. En el asma típico de comienzo tardío, aunque suele detectarse una IgE sérica total elevada, las pruebas cutáneas son con frecuencia negativas.
En contraste, en un elevado porcentual de pacientes cuyo primer síntoma de asma apareció después de los 65 años, es frecuente el antecedente de un cuadro infeccioso de las vías respiratorias superiores.
Diagnóstico
Al igual que sucede con los otros grupos etarios el diagnóstico se basa en la historia clínica, examen físico y las pruebas de función respiratoria.
Los síntomas sobresalientes son disnea, sibilancias, tos seca o productiva y opresión torácica. Estos se presentan de manera episódica, con intensidad y duración diferentes en cada paciente. También son frecuentes los síntomas larvados no clásicos o “equivalentes asmáticos” que se puede confundir con otros procesos. La manifestación poco clara de la signosintomatología más la presencia de otras enfermedades, frecuentes en la edad avanzada, puede aportar confusión en el diagnóstico, en particular cuando coexisten el asma y el antecedente de tabaquismo. En este caso podría significar la presencia de un Síndrome de solapamiento Asma/EPOC. También es necesario determinar la gravedad de las crisis, la cual será dada por la frecuencia e intensidad de los síntomas y la medición del pico flujo.
El diagnóstico temprano de asma en un paciente de edad avanzada requiere un alto índice de sospecha
Complicaciones
El asma crónico favorece el desarrollo de cambios anatómicos en los pulmones que aumentan su susceptibilidad para las infecciones.
El asma no controlado se asocia a una alta tasa de morbilidad con deterioro de la calidad de vida e insuficiencia respiratoria agudo con riesgo de muerte
Otro factor que pone en riesgo la vida de estos pacientes son los efectos cardiotóxicos de los fármacos usados habitualmente para tratar el asma (beta-adrenérgicos y teofilinas), que pueden causar enfermedad arterial coronaria o trastornos graves del ritmo cardíaco
En pacientes asmáticos de la tercera edad las infecciones causan más muertes que las crisis agudas de asma.
Tratamiento
Es fundamental identificar los precipitantes de las crisis (exposición a alérgenos o irritantes, infecciones, medicamentos, supresión brusca o rápida de corticoides) para poder evitarlos.
La relevancia de diagnosticar el asma reside en la posibilidad de prescribir tempranamente antiinflamatorios (corticoides inhalados)
Es imprescindible que el paciente comprenda la relevancia de NO INTERRUMPIR EL TRATAMIENTO