El diafragma, el principal músculo de la respiración, está inervado por los dos nervios frénicos, el derecho y el izquierdo. Las lesiones de este nervio producen parálisis del diafragma, unilateral o hemidiafragmática si se lesiona un nervio, y bilateral o total si se dañan ambos. La parálisis unilateral es más frecuente y puede responder al tratamiento fisioterápico.
El nervio frénico transcurre desde el cuello hasta el diafragma atravesando el tórax hasta llegar al diafragma por lo que las lesiones pueden suceder en varias partes de su trayecto.
Cuello
- Traumatismos
- Osteoartritis de las vértebras cervicales
- Intervención quirúrgica
- Tumores
- Radioterapia
Tórax
- Ventilación mecánica
- Pleuritis
- Neumonía
- Cirugía (abierta del corazón)
- Aumento del tamaño de los ganglios del mediastino
- Tumores pulmonares o del mediastino
Enfermedades neurológicas
- Síndrome de Guillain-Barré
- Esclerosis múltiple
- Esclerosis lateral amiotrófica
- Intoxicaciones (alcohol)
- Infecciones (difteria)
Manifestaciones clínicas de la parálisis diafragmática
Unilateral
- Asintomática
- Disnea
- Disminución del rendimiento durante el ejercicio
Bilateral
- Disnea en reposo
- Necesidad de dormir semisentado (ortopnea)
- Trastornos respiratorios durante el sueño con despertares, somnolencia diurna, dolores de cabeza matutinos
- Atelectasias
- Infecciones respiratorias
- Insuficiencia respiratoria
Tratamiento
El tratamiento depende de la causa, la presencia o ausencia de síntomas y la existencia o no de trastornos de la ventilación durante la noche.
En casos más graves puede ser necesario el soporte ventilatorio, únicamente durante el sueño o continuo durante el día y la noche. Este tratamiento puede ser temporario (Guillain- Barré) o permanente como en caso de enfermedades progresivas (esclerosis lateral amiotrófica).
La ventilación mecánica no invasiva es una alternativa terapéutica de gran utilidad en caso de necesidad.