Infecciosa
La rinosinusitis aguda más frecuente es causada por virus y se reconoce como “resfrío común”, no necesita más tratamiento que descongestivos tópicos u orales para aliviar los síntomas.
En aproximadamente el 1% de los casos sobreviene una sobreinfección bacteriana, la cual debe sospecharse cuando los síntomas se agravan después de cinco días de evolución, son desproporcionados a pesar de la breve duración del cuadro, o persisten por más de 10 días. En estos casos están indicados los antibióticos.
Los hongos suelen complicar a pacientes con enfermedades crónicas (diabetes) o inmunodeprimidos (infección por VIH, neoplasias hematológicas). La rinosinusitis micótica puede se de evolución aguda o crónica y se trata con antifúngicos.
Las complicaciones de la rinosinusitis infecciosa son abscesos cerebrales, meningitis bacterianas y celulitis por extensión orbitaria de la infección.
Alérgica
La rinitis alérgica desencadenada por alergenos presentes en espacios abiertos (polen) se conoce como fiebre del heno; con frecuencia tiene carácter estacional y se presenta conjuntamente con conjuntivitis alérgica. Se trata de una rinosinusitis crónica en pacientes que suelen tener antecedentes de asma o dermatitis atópica. El primer paso es eliminar el contacto con los factores desencadenantes. Los antihistamínicos son el tratamiento de elección en los casos leves. Cuando los síntomas son muy importantes o el cuadro se cronifica se puede recurrir a corticoides por vía nasal o estabilizadores de la membrana de los mastocitos (cromoglicato). Los descongestivos únicamente alivian los síntomas.
Irritantes ambientales
El humo del tabaco es el principal y más frecuente irritante de la mucosa de la nariz. Fumar un paquete diario durante cinco años causa daño nasosinusal crónico. El daño incluye, también al fumador pasivo. El cloro del agua de las piscinas es otro irritante a tener en cuenta en pacientes que practican natación.
Causas físicas
Entre las causas físicas se mencionan la obstrucción mecánica por pólipos nasales, desviaciones del tabique nasal y tumores. Los cuerpos extraños son en particular frecuentes en niños (rinosinusitis unilaterales)
Condiciones genéticas
La rinosinusitis aguda y crónica son manifestaciones habituales de la fibrosis quística y suelen coexistir pólipos nasales. En general se trata de sinusitis infecciosa bacteriana aunque el 20% de los pacientes también padece fiebre de heno. El tratamiento es el mismo que se aplica a las manifestaciones pulmonares de la fibrosis quística. La discinesia ciliar es otro trastorno genético caracterizado por una disfunción de las cilias que facilita las infecciones sinusales y también bronquiales.
Abuso de descongestivos nasales
Los descongestivos causan vasoconstricción y alivian los síntomas de inflamación de la mucosa nasal como el taponamiento y la rinorrea. Sin embargo, automedicarse y usarlos por tiempo prolongado –más de cinco días- provoca lo que se conoce como efecto rebote. Es decir que la mucosa se congestiona cada vez más y requiere dosis más frecuentes para aliviar el síntoma. El uso prolongado de descongestivos nasales conlleva el riesgo de desarrollar una rinosinusitis medicamentosa y en ocasiones puede haber atrofia de la mucosa.