La presente revisión analiza el papel de la tomografía computada de alta resolución (TCAR) como método para el seguimiento y pronóstico de la fibrosis pulmonar idiopática y las dificultades que se presentan a la hora de identificar con certeza un patrón en panal de abejas.
La TCAR es una herramienta esencial para diagnosticar fibrosis pulmonar idiopática (FPI) siendo uno de los criterios para definir el diagnóstico la visualización de un patrón definido de neumonía intersticial usual (NIU) en aquellos carentes de biopsia (Raghu et al; AJCCM; 2011). Un patrón de definido de NIU en la TCAR reúne 4 criterios radiológicos: predomino basal subpleural, anomalías reticulares, imagen en “panal de abejas” con o sin bronquiectasias por tracción y ausencia de alteraciones no coincidentes con NIU. La distribución del “panal de abejas” es basal y periférica; también adquiere un aspecto en “hoja de hélice” caracterizado por cambiar de posterior a anterior al visualizar secuencias axiales en dirección caudal-craneal.
Si bien la Fleischner Society propone como criterio radiológico “la presencia de espacios aéreos quísticos agrupados, quistes de diámetros comparables, y quistes con diámetros < 10 mm rodeado de paredes bien definidas”, no existe una universalmente aceptada, con las consiguientes controversias sobre la confiabilidad del diagnóstico. Entre las dificultades más prominentes se plantea el diagnostico diferencial con las bronquiectasias de tracción y el enfisema. También es dificultoso establecer el diagnóstico diferencial con la neumonía intersticial inespecífica (NII) aunque en esta última predominan las opacidad en vidrio esmerilado y la distribución peribroncovascular.
En pacientes con anomalías reticulares basales, subpleurales, sin otras características atípicas, la escasez o ausencia de imágenes en “panal de abejas” sugiere el diagnóstico de “FPI posible”, el cual con frecuencia requiere diagnóstico mediante biopsia. Una alternativa para orientar el diagnóstico con mayor fiabilidad es integrar parámetros clínicos, en particular la edad avanzada se asocia con FPI a tal punto que puede ser suficiente este factor para cambiar un diagnóstico de “posible FPI” a “FPI probable”
Recientemente se ha adjudicado a la TCAR valor como método para el seguimiento y pronóstico de la FPI. Ello se basa en su utilidad para poner en evidencia las bronquiectasias de tracción y reflejar la extensión de la fibrosis, dos parámetros con notable impacto en el pronóstico de la enfermedad (Sumikawa et al, AJCCM; 2008) (Walsh et al, Thorax; 2014) (Lee et al; AJR Am J Roentgenol., 2012).
Conclusión
Los autores concluyen que a la hora de emitir un diagnóstico es importante considerar la calificación de “posible FPI” para identificar pacientes sin examen histopatológico en los que una biopsia podría confirmar el diagnóstico en forma concluyente. Respecto del valor pronóstico de la TCAR señalan el valor de las bronquiectasias por tracción en el momento del estudio inicial, y la progresión de la fibrosis y el panal de abejas como indicadores de mal pronóstico
Acceso libre al artículo original
Anand Devaraj. Imaging: how to recognise idiopathic pulmonary fibrosis. Eur Respir Rev 2014;23:215–219